Los lagartijos son diurnos y viven en la vegetación. Algunos habitan en los árboles, otros pasan el tiempo en arbustos y algunos frecuentan las hierbas. Durante noches sucesivas duermen generalmente en el mismo lugar. El macho es territorial y defiende su espacio mediante movimientos verticales del cuerpo (lagartijas o push-ups), ondulaciones del rabo y despliegues de su colorida gaita o pliegue gular; estas señales son usadas también para comunicarle a un depredador que ha sido detectado y que el lagartijo está preparado para huir. Si otro macho insiste en invadir su territorio, el encuentro puede culminar en un combate durante el cual los dos gladiadores corren alrededor uno del otro, emitiendo chasquidos, empujándose y, de ser necesario, mordiéndose. Tarde o temprano uno de los combatientes se queda con el territorio y el otro se retira. Los despliegues de la gaita también se emplean para atraer a las hembras, que ocupan territorios más pequeños dentro del territorio del macho. Si la hembra está receptiva, los dos se encuentran, sucede la cópula y más tarde la hembra pone uno o dos huevos entre la hojarasca, debajo de las piedras o en otro lugar oculto.
Los lagartijos se alimentan mayormente de insectos, aunque también comen arañas, lombrices, caracolitos, frutas y lagartijos de otras y hasta de su misma especie. La estrategia de cacería consiste en observar inmóviles para evitar ser detectados, cuando ven una presa se acercan y de ser necesario corren para atraparla. Los lagartijos son cazados por ciempiés, culebras, siguanas, mangostas y por una variedad de aves que los consumen en el momento o los llevan a sus nidos para alimentar sus polluelos. Si el lagartijo es agarrado por el rabo, prontamente lo suelta para escapar y más tarde lo regenera. En Puerto Rico viven diez especies de lagartijos, tres de las cuales con mayor o menor frecuencia entran a las casas o se observan en sus inmediaciones. La especie más conocida en toda la isla y la que con mayor frecuencia nos visita es el lagartijo común, Anolis cristatellus, llamado en inglés common Puerto Rican anole y Puerto Rican crested anole.
Cristatellus significa que posee una cresta, en referencia a la cresta que con cierta frecuencia se desarrolla en el dorso del cuerpo y/o del rabo, y que les da cierto aspecto de dinosaurios. Estos lagartijos habitan por lo general a poca distancia del suelo, lo que les predispone a explorar las plantas de las terrazas, las rejas, y de allí las paredes y las ventanas. En estos lugares encuentran insectos para comer y protección de sus depredadores. La tela metálica de las ventanas es un buen lugar para conseguir insectos, pero también provee acceso a las casas, donde, incapaces de encontrar la salida, muchos languidecen y finalmente mueren de hambre (si no son antes cazados por un perro o un gato). La especie es nativa de Puerto Rico y las Islas Vírgenes pero se ha introducido a la República Dominicana y la Florida.
Anolis pulchellus, el lagartijo jardinero o lagartijo rayón (en inglés sharpmouthed lizard), rara vez entra a las casas pero sí a los balcones y las terrazas que tienen rejas y plantas en tiestos y canastas. Se distingue fácilmente del lagartijo común por su color pardo-amarillento, su apariencia más delicada o estilizada (sharp-mouthed se refiere a la cabeza alargada) y porque posee una línea amarilla lateral que recorre el largo del cuerpo; el macho tiende a ser más oscuro y tiene una banda oscura que cruza el ojo. Pulchellus significa pequeño y lindo, por su apariencia atractiva y el menor tamaño de esta especie en comparación con otras. Este es el lagartijo más común de la isla y en algunas localidades puede ser muy abundante (hasta veinte mil individuos por hectárea). Vive usualmente entre las hierbas y se alimenta mayormente de hormigas, alevillas pequeñas y caracolitos. Por otro lado, es una de las presas principales de la corredora puertorriqueña y también de lagartijos comunes grandes. La especie es nativa de Puerto Rico y las Islas Vírgenes.
Anolis evermanni se conoce como lagartijo verde en español y como emerald anole en inglés, ambos apelativos se refieren a su atractivo color. Cuando se excita puede tornarse pardo oscuro (pasando por una fase intermedia amarillo-verdosa) y entonces puede confundirse con el lagartijo común, aunque su piel parda es uniforme y aterciopelada, mientras que la de cristatellus es manchada y lisa. La gaita del macho es amarilla. Este lagartijo se encuentra por lo general en troncos de árboles en zonas boscosas, por lo que su presencia dentro o cerca las casas se limita a residencias ubicadas cerca de áreas boscosas. Estudios han revelado que este lagartijo aprende rápido y que recuerda la ubicación del alimento. En un experimento, varios lagartijos recordaron que el alimento se encontraba debajo de una tapita y la removieron embistiéndola con el hocico o mordiéndola para levantarla.
Recordaron además bajo cuál de las tapas estaba el alimento cuando se usaban tapas de distinto color. La especie vive únicamente en Puerto Rico.

Dr. José A. Mari Mutt
Nació y se crió en Mayagüez, Puerto Rico. Obtuvo el grado de Bachiller en Zoología en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico y los grados de Maestro y Doctor en Entomología en la Universidad de Illinois. Durante 35 años trabajó como profesor de Biología en el RUM.
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